Cortar las flores, las hojas o las ramas procedentes del jardín para preparar un adorno floral constituye una de las grandes pasiones de muchas personas.
La mayoría de estos arreglos florales decorarán las entradas, salones, cocinas, de sus viviendas.
Muchas personas preparan con mimo determinadas zonas del jardín para cultivar flores que destinarán al arreglo floral.
Entrecavan el suelo, plantan, abonan y una vez que se ha producido la floración riegan con sumo cuidado sin arrojar agua por encima de las flores.
Determinados macizos o arriates pueden contener bulbos de narcisos o tulipanes, rosas, margaritas, calas ...
Las hojas de las calas como de las aspidistras aportan una gran elegancia a cualquier ramo.
La primavera es la época del año en la que se saca mayor partido a la hora de realizar ramos, mientras que en otoño e invierno hay que tener más imaginación pero aún así, podremos utilizar ramas de árboles y arbustos combinando los diferentes colores otoñales.
Recordemos que las flores deben cortarse por la mañana o al atardecer y siempre antes de que estén abiertas.
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