La Calibrachoa hybrida, sabemos que forma parte de un grupo de híbridos relacionados con las petunias.
De ahí, que la calibrachoa hybrida sea conocida como petunia calibrochoa.
Es una planta perenne que suele alcanzar una altura de 25 ó 30 centímetros. Se desarrolla fácilmente y no teme los fríos, por eso es frecuente verla en países del norte como Noruega, Suecia, Finlandia.
Sus pequeñas hojas se convierten en el perfecto marco para la representación pintoresca de unas gráciles flores de diferentes tonos.
Flores en forma de trompeta donde la paleta cromática abarca los rosas, amarillos, naranjas, blancos.
Su ubicación preferida es siempre zonas soleadas, protegidas de inclemencias perturbadoras que arruinen su espectacular floración.
En plena floración necesita riegos periódicos, evitar encharcamientos y abonar de vez en cuando.
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