Vigoroso arbusto de unos 70 ó 80 centímetros de alto, forma densos matorrales como podemos apreciar en la fotografía.
Sus hojas son ovaladas de color verde oscuro intenso.
A finales del verano nacen unas flores colgantes a modo de pendientes que asemejan farolillos chinos.
Cada flor pende de un tallo muy delgadito y pueden ser de diferentes colores y tamaños.
Prefiere suelos ricos en nutrientes y húmedos.
Como planta de interior no da problemas, sólo hay que colocarla en un lugar con mucha luz, protegida de los intensos rayos solares y regarla cada dos semanas en invierno y cada semana en verano.
El clima cálido de ciertas regiones favorece su floración y resulta excelente para lograr composiciones con mucho color.
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