La buganvilla es una
trepadora que pueden llegar a alcanzar una altura aproximada de 8 a
10 metros, aunque todos sabemos que sus ramas se desplazan tanto
verticalmente como horizontalmente.
Es una planta que
prefiere suelos fértiles, nutridos y bien drenados.
Su ubicación es siempre
a pleno sol, es castigada por las heladas.
Las flores de la
buganvilla hacen su aparición en verano y duran hasta bien entrado
el invierno.
Las primeras hojitas nace
protegidas por una suave pelusilla y a medida que van creciendo se
tornan de un verde intenso. Sus ramas se encuentran cubiertas por
espinas curvas, puntiagudas y por supuesto muy peligrosas.
Aconsejamos no
podarla, pero sí eliminar tallos muertos para favorecer
su valor ornamental.
Se multiplica por
esquejes en invierno.
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