En el mercado existe una gran variedad de lámparas, focos, farolillos y velas para iluminar cualquier rincón de nuestro jardín.
Todos ellos cuentan con unos efectos especiales y luminotécnicos casi mágicos.
Aunque realmente, pienso que para producir unos sorprendentes efectos mágicos, sólo necesitamos la proyección de luz solar o la luz de la luna.
La utilización de espejos, motivos reflectantes, materiales fotoluminiscentes, ladrillos de cristal de diferentes colores, logran composiciones muy creativas.
En el caso de los espejos, lo importante es saber colocarlos de tal manera que capturen esa luz y la emitan sin deslumbrarnos.
Por la noche, la luz de las estrellas y de la luna provocan un ambiente idílico y muy placentero.
Los materiales fotoluminiscentes brillan en la oscuridad, no son muy conocidos pero son tendencia.
Los materiales fotoluminiscentes brillan en la oscuridad, no son muy conocidos pero son tendencia.
Los ladrillos de cristal nos permiten por un lado construir paneles que dejan pasar la luz y por otro separar los espacios del jardín.
La simple utilización de velas, añaden un toque muy pintoresco en esta clase de espacios.
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